Visitar la capital de Cataluña es respirar aires de mar y encontrarse cara a cara con el Mediterráneo mientras se admira la belleza de una ciudad tan cosmopolita como histórica. Barcelona es la vitrina por excelencia del Modernismo, movimiento rompedor y renovador que tuvo su auge entre finales del siglo XIX y principios del XX.
Situado a los pies del Tibidabo, en el barrio de Sarrià Sant Gervasi, encontramos el restaurante Bonanova ofrecen desde hace 50 años sus servicios gastronómicos a vecinos, amigos y amantes del restaurante de cocina tradicional en Barcelona. La filosofía ha sido siempre la misma: apostar por los productos de temporada. Antiguamente conocido como “Los Billares” o “El Casinet de Sant Gervasi” es un sitio emblemático en Barcelona por la arquitectura modernista originaria de la época.
En los setenta, Adolfo y el artista Joan Bigas i Balcells se deciden a mimar el Bonanova en materia de interiorismo. “Lo autentificaron aún más, haciéndolo el reflejo del modernismo que todavía contemplamos ahora en las baldosas, las caricaturas y retratos de Roig y Opiso que cuelgan de las paredes, la cerámica, las lámparas, el pavimento hidráulico, los estucados al fuego… nos gusta la tradición y los hijos hemos ido aportando nuestro granito de arena, con carteles originales de la primera función en Las Arenas (Llopis), del 1856 a San Sebastián… Venir aquí es huir del frenesí y dedicarse a contemplar y disfrutar de la buena mesa”. Es un restaurante abierto domingos.